Table of Contents
1 Puesta en contexto: cuándo usar este método
Este método de bordado a máquina en movimiento libre es ideal cuando quieres traducir un patrón dibujado o impreso a hilo, manteniendo el gesto manual pero con regularidad de puntada. En el motivo de referencia, las hojas se rellenan con satén azul oscuro y se enriquecen con nervaduras más profundas; los tallos se trazan en negro para delinear; los pétalos se trabajan en capas de azul claro, medio y oscuro, formando un degradado que aporta volumen.

La técnica exige cierta práctica con el control del bastidor y la velocidad de la máquina: avanzar demasiado rápido genera huecos y avanzar demasiado lento produce acumulaciones visibles. Si eres principiante, haz primero muestras pequeñas con las tres intensidades de azul para entender cómo responde tu tejido.
Desde los comentarios
- Se indica que se utilizó una máquina industrial SINGER 20u para este tipo de bordado en movimiento libre (dato reportado por la persona autora en el hilo de comentarios). No obstante, el proceso descrito aquí es aplicable a otras máquinas compatibles con movimiento libre.
- También se menciona que el tiempo estimado total fue inferior a dos horas, dependiendo de la pericia y el tamaño del motivo.
Atención
- En una pregunta de la comunidad se solicita mostrar la configuración completa de la máquina y si se necesita entretela bajo la tela. En el material de referencia no se especifica el uso de entretela ni ajustes detallados de tensión o longitud de puntada, así que te recomendamos realizar una muestra previa con tu equipo y tejido antes de iniciar la pieza final.
Comprobación rápida
- Tienes el patrón dibujado sobre tela blanca.
- El área a bordar está limpia y libre de hilachas.
- Cuentas con tres tonos de azul y un hilo negro.
- Tu bastidor sujeta la tela con firmeza y puedes moverla con control bajo la aguja.
2 Preparación: materiales y herramientas
Reúne los materiales que se observan en el proceso: tela blanca con el contorno del motivo transferido, hilos de bordar en azul oscuro, azul claro, azul medio y negro, y un bastidor para sujetar la tela. Asegúrate de que el boceto esté bien visible, porque las líneas guiarán tus pasadas de satén y el contorno de pétalos.
Aunque el vídeo no menciona marcas de estabilizadores ni pesos, si tu tela es fina o elástica, una entretela de apoyo puede ayudarte a mantener la densidad del satén sin arrugas. Haz pruebas, porque el comportamiento cambia con cada combinación de tela e hilo. En proyectos donde se repiten piezas, una preparación consistente ahorra correcciones posteriores.
En el puesto de trabajo, deja espacio suficiente a ambos lados de la máquina para maniobrar el bastidor en curvas largas. Una iluminación frontal evita sombras que confunden el borde real del pétalo con la zona ya rellenada.
Si sueles alternar entre varios bastidores, organizar el flujo agiliza los cambios de color. En esos casos, ayuda contar con estaciones de colocación del bastidor para que cada pieza entre a la máquina centrada y recta de forma repetible.
Comprobación rápida
- Tela blanca limpia, patrón claro y centrado.
- Hilos: azul oscuro, azul claro, azul medio y negro al alcance.
- Aguja adecuada y bien afilada.
- Bastidor ajustado sin holguras; el tejido no se arquea.
- Muestra de prueba preparada para validar densidad y tensión.
3 Configuración de la máquina
En movimiento libre, el control depende de tu mano: se mueve la tela bajo la aguja para orientar la puntada. No se especifican modelos ni valores de tensión en el material original; por ello, ajusta la tensión para que el satén asiente liso y sin “dientes” de hilo sobresalientes. La aguja debe pasar con facilidad sin tirar de la trama.
Desde los comentarios
- Se confirma el uso de una SINGER 20u industrial en zigzag por parte de la persona autora. Si trabajas con otra máquina compatible, por ejemplo una máquina de bordar brother, céntrate en poder trabajar en modo de movimiento libre y en controlar bien la plataforma bajo la aguja.
Consejo profesional
- Unas pasadas de prueba con tres líneas curvas te dirán si la densidad del satén y la respuesta del tejido son correctas: busca un brillo continuo y bordes nítidos. Un ligero solapamiento en cada vuelta elimina microhuecos entre pasadas.
Comprobación rápida
- La máquina cose sin tirones en curvas lentas y rápidas.
- El hilo no se deshilacha; la aguja atraviesa limpio.
- La puntada reposa plana; no hay bucles por tensión floja.
4 Ejecución: paso a paso
La secuencia que sigue reproduce el orden observado: hojas en azul oscuro (contorno y relleno), nervaduras más oscuras, tallos negros, y por último los pétalos de la flor del exterior al centro en tres tonos.
4.1 Hojas en azul oscuro: contorno y relleno
Comienza trazando el borde de la primera hoja con azul oscuro. Mantén el ancho del satén constante y acompaña la curva del borde con el bastidor, sin forzar la tela para no deformar el contorno.

Rellena la hoja con pasadas compactas de satén, alineadas entre sí. El objetivo es formar un bloque sólido y uniforme, sin rayas claras entre líneas.

Controla el ritmo: manos y pedal deben ir sincronizados. A mayor velocidad de aguja, tiende a mejorar la uniformidad del brillo, siempre que el movimiento sea continuo.

Cierra el relleno con precisión hasta la línea de lápiz sin rebasarla. Si aparecen pequeñas muescas, corrige con una última pasada tangencial.

Repite el proceso en hojas pequeñas, ajustando el ángulo de entrada y salida para que el satén “abrace” las puntas sin formar un bulto.

Atención
- No gires en seco; rota el bastidor mientras la aguja está clavada para conservar el borde vivo y la densidad.
4.2 Nervaduras en azul más oscuro y tallos negros
En la hoja grande ya rellenada, añade nervaduras con un tono aún más oscuro de azul. Son líneas finas que atraviesan el satén y dan profundidad. Mantén la presión uniforme para que no hundan la superficie.

Traza una a una las líneas de la nervadura, cuidando que nazcan en el centro y se abran hacia el borde. La separación debe ser regular para que la textura se lea como orgánica y no como estrías.

Comprueba el contraste: la nervadura ha de verse, pero sin “romper” el bloque. Si brilla demasiado, reduce ligeramente la densidad en esas líneas.

Trabaja luego las hojas pequeñas a lo largo del tallo, manteniendo el patrón repetitivo y el mismo azul oscuro del relleno.

Con hilo negro, dibuja los tallos principales que conectan hojas y flor. Son líneas delgadas y limpias que actúan como “esqueleto” del motivo. Procura una trayectoria continua para evitar nodos visibles.

Consejo profesional
- Para líneas negras rectas y delicadas, prueba en tu muestra a sostener el bastidor con ambas manos a la misma altura, distribuyendo la presión; la línea resultará menos ondulante.
4.3 Pétalos exteriores en azul claro
Cambia a hilo azul claro y comienza por los pétalos externos de la flor. Rellena desde los bordes hacia el interior para respetar la silueta y que el brillo del satén marque la forma.

Sigue rellenando pétalos contiguos, construyendo volumen. Mantén el sentido del satén constante dentro de cada pétalo, pero permite ligeros abanicos para acompañar la curva.

Atención
- Evita apoyar la mano sobre zonas ya bordadas: el satén recién cosido puede marcarse. Trabaja del área más alejada hacia ti, y gira la pieza cuando sea necesario.
4.4 Pétalos interiores en azul medio
Introduce el hilo azul medio y rellena la franja intermedia de la flor, acercándote al centro. Busca un solapamiento sutil con el azul claro para crear una transición suave, sin cortes visibles.

Comprobación rápida
- La transición claro → medio no presenta “escalones”.
- El borde de cada pétalo se mantiene nítido y sin encaje sobre el tallo negro.
4.5 Centro de la flor en azul más oscuro
Para el corazón de la flor, usa el azul más oscuro. Rellena con satén muy denso para que el centro actúe como punto focal. Comprueba que el borde interior de los pétalos no quede pisado en exceso.

Consejo profesional
- Finaliza el centro en sentido circular o radial para reforzar la idea de núcleo; en muestras previas decide qué dirección resalta mejor el brillo en tu tela específica.
Checklist de ejecución
- Hojas: contorno y relleno en azul oscuro completos y uniformes.
- Nervaduras: visibles sin partir el bloque, separaciones regulares.
- Tallos: líneas negras limpias y continuas.
- Pétalos: degradado claro → medio → oscuro cerrado sin saltos.
- Centro: satén denso, foco visual nítido.
5 Control de calidad
Al terminar cada bloque (hoja, tramo de tallo, anillo de pétalos), detente a evaluar:
- Densidad: no deben verse espacios de tela en el satén. Si aparecen, añade una pasada de relleno.
- Borde: el filo del satén debe coincidir con el contorno dibujado. Corrige con pasadas cortas donde el borde “muerda” la línea.
- Brillo: el sentido de la puntada debe producir un brillo continuo; si hay parches opacos, suaviza con pasadas que alineen el ángulo.
- Transiciones: entre azules, busca un solapamiento que esconda el escalón.
Comprobación rápida
- Las hojas oscuras parecen piezas sólidas, sin líneas “costilla” involuntarias.
- Las nervaduras se leen como detalle, no como grietas.
- Los tallos negros no invaden las hojas ni los pétalos.
- La flor luce gradiente suave; el centro oscuro capta la mirada.
Desde los comentarios
- Varias personas señalan el efecto “terapéutico” de mirar y crear este tipo de bordado. Esa calma viene del ritmo constante y de la repetición cuidada de pasadas: úsalo a tu favor para mantener calidez y uniformidad.
6 Resultado y siguiente paso
El motivo completo muestra hojas oscuras densas con nervaduras más profundas, tallos negros finos y una flor de azules en degradado con un centro muy oscuro. Esta composición, inspirada en cerámica tradicional, destaca por la limpieza de los bordes y por el brillo del satén al seguir la forma de cada elemento.
En el material de referencia se exhibe el tejido bordado junto a las bobinas utilizadas y, finalmente, se compara con la fuente de inspiración para apreciar la fidelidad del resultado. El tiempo total estimado, según se comenta, no superó las dos horas, aunque dependerá de tu tamaño de diseño y dominio de la técnica.
Si quieres repetir el motivo en serie, planifica un flujo de preparación: bastiar, contornear hojas, rellenar, nervar, trazar tallos y finalmente pétalos por anillos de color. Para mantener la misma alineación entre piezas, es útil disponer de bastidores de bordado magnéticos, que sujetan con firmeza sin deformar y aceleran el cambio entre trabajos.
Consejo profesional
- Cuando alternes entre telas o lotes, etiqueta tus pruebas con el orden de color, densidad aproximada y tensión que funcionaron mejor. Esa “bitácora” reduce el descarte en reproducciones futuras.
7 Solución de problemas y recuperación
Síntoma → Posible causa → Qué hacer
- Satén con pequeños huecos visibles → Pasadas separadas o ritmo irregular → Añade una pasada intermedia siguiendo la misma dirección; practica curvas en tu muestra para estabilizar la mano.
- Borde dentado o que no coincide con el contorno → Giro brusco del bastidor o tensión alta → Realiza giros con la aguja clavada y afloja ligeramente la tensión hasta que el borde quede liso.
- Nervaduras que “rompen” la hoja → Contraste excesivo o densidad alta en la línea → Reduce la densidad de la nervadura o separa más las líneas para que sean un acento, no una grieta.
- Transición de azul claro a medio con escalón visible → Sin solapamiento o cambio de dirección abrupto → Superpone unas pocas pasadas del tono medio sobre el claro y unifica el ángulo de brillo.
- Centro de la flor abultado → Exceso de pasadas en un punto fijo → Reparte el relleno en sentido radial; si ya está abultado, compensa con un prensado ligero por el revés con paño protector.
Desde los comentarios / FAQ
- ¿Hace falta entretela? No se especifica en el material original. Si tu tela es muy fina o elástica, prueba con una capa de apoyo en tu muestra y adopta la que te dé mejor estabilidad.
- ¿Qué máquina se utilizó? Se reporta una SINGER 20u industrial en zigzag. Cualquier equipo que permita movimiento libre y control estable del bastidor es válido.
- ¿Cuánto tarda? La estimación compartida indica menos de dos horas para el motivo mostrado, variando con el tamaño y la práctica.
—
Guía de herramientas complementarias
- Si produces en series, plantillas y bastidores de pinzas para bordado ayudan a posicionar piezas pequeñas sin deformar.
- Para estandarizar el centrado en prendas, utiliza estaciones de colocación del bastidor o guías de alineación que te den repetibilidad.
- Cuando trabajes con múltiples marcos, alterna uno cargando mientras otro está en la máquina; la organización se simplifica si empleas sistemas como hoopmaster en tu mesa de preparación.
Elección de bastidor y sujeción
- Para tejidos gruesos o delicados, una sujeción por imanes minimiza marcas y acelera el montaje; si buscas un marco versátil, considera un bastidor de bordado magnético para máquina de bordar.
- Si trabajas con diferentes equipos o compartes taller, disponer de bastidores de bordado para máquina de bordar de varios tamaños te permitirá adaptar el área activa al motivo sin arrastrar tela.
Nota sobre compatibilidad
- El método descrito no depende de una marca concreta de bastidor o máquina. Si te mueves entre equipos de la misma familia, por ejemplo bastidores de bordado para brother, verifica siempre dimensiones útiles y holgura respecto al prensatelas para evitar topes en los giros.
